Aviso.
Este es un post para los no fotógrafos. Siempre hablo sobre la educación visual y cultural que debe tener un fotógrafo, pero pocas veces comentamos que esa educación debe fomentarse también entre aquellos que requieren del trabajo de un fotógrafo. Todos y cuando digo todos me refiero a TODO el mundo, a lo largo de su vida requiere de los servicios de un fotógrafo.
Antes, cuando no éramos nosotros quienes elegíamos sino que recurríamos al fotógrafo de barrio o a alguno por recomendación,
las posibilidades de elegir eran escasas al mismo tiempo que la oferta era por lo general siempre la misma. Fotografías de estudio, de comunión o de boda siempre con las mismas poses a las cuales no poníamos objeción. Menos mi madre, que cuando nos recomendaron un fotógrafo para las fotos de mi recordatorio, no le gustaron nada hasta el punto que la foto que tienen mis padres en el salón, no es de aquel laboratorio, sino la que me hicieron otros fotógrafos contratados en la iglesia. Y aquí es, donde por parte de mi madre, vemos criterio, aunque nos comiésemos con patatas aquellas fotos.
Por suerte, los tiempos están cambiando y con ello los gustos y el cada vez más criterio por parte de los clientes. Lo que pretendo con este artículo es concienciar a los no fotógrafos para que utilizando las herramientas de búsqueda que nos ha brindado la estupenda Red,
puedan elegir aquellos fotógrafos que mejor se adecuen a sus inquietudes. Normalmente se contrata a un determinado fotógrafo más por la oferta monetaria que por la oferta creativa, y es ahí donde debemos cuidarnos todos.
Si somos capaces de ver la maravillosa fotografía en una película cuando nos atrapa en el cine, ¿por qué no somos capaces de discernir entre un buen fotógrafo y otro menos bueno? Desde aquí insto a las personas que
antes de contratar a un fotógrafo se informe, vea sus trabajos y decida si se adecua a la idea que tiene en su cabeza. Si sólo quieren un recuerdo del momento o por el contrario un recuerdo del cual sus nietos se sientan maravillados con el paso de los años. Porque, por ejemplo, a mí me siguen fascinando mucho más las fotografías de mis abuelos que las que se hacían en la época de mis padres. No es sólo una cuestión vintage. Es la idea de un trabajo bien hecho.
Por lo general no
a todos los fotógrafos se nos dan bien todos los géneros, por ello, muchas veces se ven incoherencias en los trabajos, precisamente porque se han contratado para situaciones a las cuales aún no saben sacar todo el partido. En mi caso suelo llevar a mi terreno los momentos de soledad, los cuales suelo contagiar en mi fotografía de retrato, pero digo yo que también tendré mi público.
Por ello, si estás buscando un fotógrafo con un registro determinado, no dudes en
pedirme información, te pondré en contacto con los mejores ;)