Hace unos días, puede que meses, escribía en mi perfil de Facebook que me había dado cuenta que antes iba al cine por rellenar espacios de tiempo. Viéndolo así puede parecer que soy una persona a la que el 7º arte no le apasiona, cuando en realidad y los que me conocen lo saben, es una disciplina que adoro.
Durante la carrera fue la única materia que me aportó una matrícula de honor y, aunque ahora mi vida se haya centrado en la fotografía, es una de esas espinitas que tengo clavadas en mi corazoncito de fotogramas.
Hubo un tiempo en el cual disponía de una tarjeta de los cines Renoir para ver las películas en VO, que son como me gustan, porque todo cambia cuando se oyen las voces originales de los actores. Cuando se sienten los suspiros salir de su boca. Cuando las lágrimas se quedan ahogadas en la garganta.
Ya hace un tiempo que no voy al cine, no por ganas, si no por tiempo.
El no ir al cine me había provocado una sequía. Es dificil transmitir esa pereza de volver a construir una rutina por mucho que te apasione. Como todo, son rachas. Ahora que he vuelto a reecontrarme conmigo misma y con el cine, puedo decir que ando entusiasmada cogiendo ideas para artículos y para fotografías. De vez en cuando intento meter algún post en Xataka Foto que tenga relación con el cine. Me gusta enlazar ambas disciplinas, porque ambas pueden llegar a ser una.
He aquí algunos fragmentos de mis posts, ojalá tengáis más tiempo para leerlos completos en la web. Me despido con un FIN muy cinéfilo, cuando en realidad es un AL FIN. Porque al fin he vuelto y espero no irme en un tiempo.
Sin embargo anoche, por alguna razón que desconozco, llegó a mis manos y, esta vez sin pensármelo, le di una oportunidad. Desde el primer momento que vi la cámara titubear me dije, “no estás ante otra película americana, estás delante de algo que bebe de la fuente del mejor cine experimental, así que disfrútala desde esa perspectiva”. Y así lo hice.Sobre "El árbol de la vida"
No se me había ocurrido rebuscar en los archivos sobre los primeros stop motions hasta que gracias a Scorsese y su “Invención de Hugo” hice una regresión a los tiempos de Lumiere y George Méliès. Con ello caí en la cuenta que en sus películas coquetearon con ello. Sin embargo, no podemos catalogar esas cintas dentro de esa técnica, pero sí las que veremos a continuación, sin duda menos conocidas para el gran público de hoy, aunque sumamente atractivas bajo nuestra mirada actual.Sobre el cine mudo y stop motions
El newyorkino de origen griego, que murió en 2012 víctima de un tumor cerebral, nos regala en esta película algunos fotogramas que de por sí merecen que la cinta sea vista. Para empezar un plano estático donde aparece el coche del protagonista (que a veces se nos antoja como un personaje más de la historia), saliendo y ocultándose de escena.
Sobre el director de Somewhere y Zodiac
Antes de nada, por aquellos que la comparan con “The artist”, decir que “Blancanieves” sí recoge totalmente la esencia del cine mudo puesto que es muda en su conjunto. Sin embargo, la producción francesa es, sobre todo, un sentido homenaje al cine que se hacía antes de la llegada del sonoro, hay guiños, se pretende una reflexión, no tiene nada que ver con el propósito de la cinta española.
Sobre Blancanieves
0 comentarios:
Publicar un comentario